CONTACTEURS. L’HISTOIRE DE NATASHA BARINOVA
Le contaremos sobre el intento de los extraterrestres de secuestrar a Natasha Barinova, de 16 años, estudiante de una escuela vocacional, residente de una de las aldeas de Kabardino-Balkaria.
El 11 de octubre de 1989, a las seis de la tarde, Natasha regresó a casa despues de clases. Entre al patio, me monte en un ciclomotor, que estaba debajo de un dosel de metal para el viñedo. He pensado en ello. De repente, una voz sonó en mi cabeza, clara, sin entonación, como un robot: “Sientate quieto mientras tu cabeza, piernas y brazos están en orden”.
Natasha miró a su alrededor. Había una red encima. Transparente, fino, como polietileno. Las celdas tienen de seis a ocho lados con lados de aproximadamente 50 mm. Una luz suave fluía desde los tejidos.
Natasha: Mi cabeza se apretó, escuche sonidos que se parecían a respirar. Sentí que estaba subiendo con el ciclomotor. Grite.
Quería agarrar el escudo contra el que se apoyaba el ciclomotor, pero la mano lo atravesó, como si estuviera en el vacío. Agitando los brazos, toque la red como si el tokem hubiera golpeado. Con dificultad me baje del ciclomotor, mis piernas se enroscaron y caí en algo blando. Al grito de la niña, los familiares saltaron de la casa: la tía Galina Rebrina y su esposo Nikolai.
Galina Rebrina: Natasha agitó los brazos, como si empujara algo desde arriba, y gritó. La voz sonaba, muy fuerte.
Natasha: Vi a mi tía a traves de la red: sus celdas eran visibles a la luz de una bombilla encendida junto al porche. Mi tía estaba hablando emocionada, pero no la escuche.
Entonces Nikolai corrió, recogió a Natasha y la condujo a la casa. En una hora, la niña recuperó el sentido y todo este tiempo le temblaban las manos. Hay rastros de la red en las yemas de los dedos.
¿Que se puede agregar a esto? Los ufólogos locales que examinaron el sitio encontraron una anomalía positiva en un área de aproximadamente 250 por 90 metros. Tambien identificaron a testigos presenciales que observaron un OVNI a gran altura sobre esta área al mismo tiempo. Y tres días despues, los residentes de la cercana Nalchik vieron nuevamente ocho objetos voladores no identificados. Al parecer, el fallido intento con Barinova no desanimó a los “secuestradores”
